Hace varios años, mi familia y yo fuimos a una serie bíblica especial en Pensilvania. Aunque residimos en los Estados Unidos desde el verano del 2005, fue la primera vez que visitamos una congregación en este estado.
Cinco varones jóvenes que están activos en la viña del Señor presentaron diferentes temas durante la serie. Nosotros asistimos un viernes por la noche y tuvimos el privilegio de oír a un hermano dominicano llamado Roger Polanco. Este joven me hizo reflexionar bastante sobre mi vida y mi objetivo como seguidor de Jesús.
Dos frases de aquel mensaje bello se me han quedado grabadas en la memoria hasta el día de hoy. Roger dijo: “Se necesita más para ser cristiano que simplemente no hacer cosas malas. Jesús ‘anduvo haciendo bienes’ (Hechos 10:38)”. Jesús fue conocido no tanto por lo que no hacía sino por lo que HACÍA.
Jesús buscó el bien físico de los hombres. Abrió los ojos de los ciegos. Hizo que los cojos anduvieran y que los sordos oyeran. Limpió a los leprosos y resucitó a los muertos. (Ver Mateo 11:5).
Más importante aún, buscó el bien espiritual de los hombres, predicándoles las “palabras de la vida eterna” (Juan 6:63,68) por medio de las cuales podrían salvarse. Ofreció una esperanza viva y descanso a los que vivían atormentados por la carga de sus pecados (Mateo 11:28-30).
Jesús demostró que era un verdadero amigo por dar su vida por ellos (Juan 15:13).
¿Qué cosas me caracterizan a mí cómo discípulo de Cristo? Cuando la gente me mira, ¿qué es lo que piensa?
Dice uno: “yo conozco a (poner el nombre de usted aquí). Es cristiano/a. No bebe, no fuma, no dice palabrotas, no miente, no roba, etc., etc”.
Sería mucho mejor si la gente pensara: “(nombre de usted) siempre está hablando con los demás de la palabra de Dios. Siempre está dispuesto a ayudar, a animar y a servir al prójimo. Es una persona generosa, amable, honrada y, pase lo que pase en la vida, siempre está gozoso/a. Siempre da su vida por los hermanos (1 Juan 3:16)”.
Que Dios nos ayude a ser conocidos no sólo por lo que no hacemos sino también por lo que HACEMOS.
–Jerry Falk